Dos “viejos conocidos” han vuelto a encontrarse en la etapa política del proceso de selección de jueces. Uno de ellos se llama Carlos Eduardo López. El otro es José Jorge Alperovich. El primero fue vetado por el segundo en seis ternas para el fuero penal. El segundo gobierna Tucumán desde hace diez años y ha designado 68 magistrados desde que el Consejo Asesor de la Magistratura (CAM) comenzó a funcionar (en octubre de 2009). El primero es secretario del Juzgado de Instrucción de la V Nominación de esta capital; previamente, prestó servicios en la extinta Fiscalía Anticorrupción que investigó a Alperovich y a su entorno.
En este último terceto, López ocupa el segundo lugar; Juan Carlos Nacul, el primero y Miguel Ángel Varela, el tercero. El cargo en juego es el de fiscal de Instrucción de la I Nominación del centro judicial de Concepción. El orden jurídico habilita al gobernador a escoger libremente dentro de la propuesta de nombres elevada por el CAM. Es más, en virtud del juicio por discriminación que inició López tras su sexto veto, la Corte Suprema de Justicia de Tucumán (CSJT) convalidó la potestad del Poder Ejecutivo (PE) para designar jueces en forma discrecional e inmotivada (en abril, la Corte Suprema de Justicia de la Nación desestimó el recurso de queja que había interpuesto López contra el fallo del alto tribunal local).
Si Alperovich se mantiene en sus trece, el concursante frustrado será descartado por séptima vez. Nacul, que ya fue rechazado por el PE en otra terna, tampoco la tiene fácil. Ocurre que es resistido por organismos de derechos y humanos que objetan su trabajo como letrado de la Caja Popular de Ahorros durante la dictadura y como defensor del ex comisario Mario “El Malevo” Ferreyra. Esos peros frustraron la designación de Nacul como juez federal de Jujuy en 2011 y como relator de la CSJT (por propuesta del vocal Antonio Estofán) en 2012. Este escenario podría favorecer a Varela, el tercer miembro de la terna, que se desempeña como funcionario en la fiscalía en cuestión.
El CAM también elevó a Alperovich una propuesta para llenar la vacante del Juzgado en lo Civil y Comercial Común de la II Nominación del centro judicial de Concepción. Esa terna está compuesta respectivamente por Eduardo José Dip Tártalo; Fernando García Hamilton y Álvaro Zamorano. A diferencia del terceto penal, no hay en este supuesto un favorito claro.
Alperovich no tiene plazo para definir los nombres que enviará a la Legislatura para que reciban el correspondiente acuerdo. Hasta el presente, el Poder Legislativo nunca ha devuelto un pliego al PE. Con carácter previo al tratamiento en el recinto, las designaciones pasan por la comisión de Peticiones y Acuerdos que preside José Orellana, legislador peronista encolumnado tras el proyecto nacional de Sergio Massa.
El CAM elevó al PE sólo cuatro ternas en lo que va de 2013 (todas las vacantes judiciales están en trámite de cobertura). Por lejos esta es la performance anual más baja de su historia en lo que hace a su función esencial: seleccionar aspirantes a jueces por medio de la sustanciación de concursos públicos de antecedentes y oposición.